La cera de abejas ha sido el material tradicional para las velas durante siglos y solo se utiliza en pequeñas cantidades debido a su valor.

Es un producto metabólico de las abejas melíferas. La valiosa cera de abejas natural se reconoce por su fragante aroma a miel y por el típico color amarillo que proviene del polen. La cera de abejas tiene un equilibrio ecológico muy favorable.