Un semillero es el lugar donde se siembran las plantas. Es un espacio preparado y acondicionado especialmente donde colocaremos las semillas con la finalidad de producir su germinación con las mejores condiciones y cuidados. De esta forma, la planta iniciará su primera fase de desarrollo sin apenas dificultad, y una vez esté lista, procederemos al trasplante en el lugar definitivo.
Lo primero que tienes que tener en cuenta es elegir el lugar donde vas a poner el semillero y las especies que te gustaría empezar a sembrar. Piensa en las plantas que mejor se adapten a tu zona, la época de su siembra y lo más importante, si esas plantas se siembran en semillero antes de hacer el trasplante o se siembran directamente en el lugar definitivo. Es decir, el tomate y la lechuga se siembran en semillero, mientras que la zanahoria y las habas no.
Vídeo sobre cómo hacer un semillero
¿Qué semillero escojo?
Hay gran variedad de semilleros, pero se pueden diferenciar en 3 tipos:
Semilleros sin protección:
Al decir sin protección, nos referimos a que la bandeja no lleva una cubierta. Tenemos varias opciones. Podemos elegir entre bandejas donde nosotros colocaremos el sustrato, o bandejas donde ya vienen tabletas deshidratadas de turba; en este caso, solo tendremos que regar la turba, ésta se hinchará y colocaremos las semillas. Además, existen bandejas con sistemas de autoriego, de esta forma, nos ahorraremos una tarea.
Otra opción puede ser comprar macetas pequeñas de turba donde dentro colocaremos un poco de sustrato y luego las podremos poner directamente en la tierra.
Semilleros con protección
Se trata de bandejas con cubierta. Aquí encontramos el semillero propagador, que consta de una bandeja con una tapa alta transparente, con dos ventanitas para evitar que se condense demasiada humedad. En su interior se puede disponer la tierra directamente o colocar los alveolos de turba. Su diseño ofrece espléndidas condiciones para la protección de las plántulas, resultado de cualquier modo de reproducción (a partir de esquejes, semillas, hojas, división de raíces,...etc.), evita las corrientes de aire y favorece un ambiente húmedo. De este modo, se pueden obtener nuevas plantas durante todo el año sin ocupar mucho espacio.
También encontramos semilleros con cubiertas de hierro o de plástico, haciéndolos más atractivos.
Germinador eléctrico
Este semillero es una bandeja cubierta que en la base lleva una pequeña resistencia que hace que se mantenga una temperatura de 20ºC, facilitando y acortando enormemente la germinación de nuestras semillas. Ideal para zonas frías.
Sustrato, semillas, herramientas
El sustrato que coloquemos en el semillero conviene que sea el mismo que el utilizado en el recipiente definitivo, de esta manera tras el trasplante no acusará menos el cambio de condiciones.
Las semillas las podremos comprar en una tienda especializada u obtenerlas nosotros mismos de cosechas anteriores (Ver artículo: Cómo seleccionar semillas). Sería una buena idea comprar semillas ecológicas.
Para realizar la siembra es interesante hacerse con alguna pequeña herramienta de mano, como una pala o un rastrillo. Además, un sembrador manual nos sería muy útil, ya que nos facilita el manejo de pequeñas semillas, controlando la cantidad de semillas que se dispone en cada alveolo o maceta y el lugar en el que se depositan.
Para regar el semillero usaremos un pulverizador o una regadera con orificios muy finos, asegurándonos que el sustrato está continuamente húmedo, por lo menos hasta que la semilla germine y aparezcan las primeras hojas.
En Planeta Huerto tenemos todo lo que necesitas para tus semilleros. Así que te animamos a que empieces a hacer un calendario de siembra y empieces no sólo a plantar, sino también a tratar y a sembrar tus semillas.