El tofu es la cuajada de la leche de soja, por eso también se le llama “queso de soja” aunque sea de origen vegetal. Suele venderse en forma de cubitos o bloques, y su apariencia es similar a la del queso fresco, pero su sabor es muy suave y su textura varía según su contenido proteico:
- Suave (5-7,9%)
- Regular (8-10%)
- Firme (11-19%)
- Prensado (+20%)
Historia
Encontramos el origen del tofu en Asia, de donde procede su ingrediente principal: la semilla de soja. No se sabe a ciencia cierta quién inventó el tofu porque existen muchas leyendas al respecto.
Según una de ellas, los monjes budistas conocían bien las propiedades de la soja, considerada uno de los cinco granos sagrados en China (además del arroz, el trigo, el mijo y la cebada), y lo dieron a conocer en Japón durante uno de sus viajes. Estos monjes defendían la importancia de una dieta sin carnes, por eso hablaban del tofu como una alternativa a la misma.
Lo que tienen en común todas las historias sobre el tofu son sus magníficas propiedades. Debido a esto, la semilla de soja empezó a importarse a Occidente a principios del siglo XX para fabricar aceite, jabones y como alimentación para el ganado. Poco después, Europa y Norteamérica decidieron incorporarla a su alimentación, siendo entonces cuando el tofu se popularizó mundialmente.
Además, la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) publicó un estudio en el que establecía que el consumo de 25 gramos diarios de proteína de soja, como parte de una dieta baja en grasas saturadas y colesterol, podía reducir el riesgo de padecer cáncer y de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Para abastecer la demanda de tofu, varios países como Estados Unidos, Canadá, Australia, Brasil y Rusia también comenzaron a cultivar semilla de soja; de ellos, EEUU es el principal productor.
Propiedades
Siendo una alternativa al consumo de carne, el tofu se asoció en un principio con la dieta vegetariana, pero lo cierto es que este alimento puede consumirse en todo tipo de dietas como sustituto proteínico, ya que contiene un elevado porcentaje de proteínas y 10 aminoácidos esenciales.
Otras de sus propiedades son las siguientes:
- Bajo en calorías
- Sin conservantes, colorantes ni productos químicos
- Libre de lactosa
- No contiene gluten, por lo que es apto para celíacos
- Rico en calcio, fósforo, vitaminas, hierro, sodio, potasio y diversos minerales
- Ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre
- Es más digestivo que otros alimentos ricos en proteínas (carne, huevos, leche...)
- Contiene isoflavonas (debido a la soja), que ayuda a inhibir la pérdida de calcio en los huesos
- Pobre en grasas saturadas y libres de colesterol, aportando ácidos grasos omega 3 y omega 6, así que es apropiado para los diabéticos
- Contiene lecitina, esencial para el colesterol y la memoria
Modo de conservación
Una vez abierto, coloca el tofu en un recipiente hermético y guárdalo en la nevera. Conviene consumirlo a los 3 o 4 días después de su abertura.
¿Cómo se come?
El tofu de Planeta Huerto es ecológico y ya viene preparado para su consumo, sólo tienes que cocinarlo a tu gusto: el de tipo blando suele usarse en sopas, salsas o guisos; el de tipo compacto es el preferido para grillar o freír.
Sin embargo, el tofu puede comerse de múltiples formas: tostado, horneado, marinado o en sopas, guisos, con verduras, ensaladas, hamburguesas, pizzas, pasta, sándwiches...
¿Cómo preparas tú el tofu?