La receta de Brownie con semillas de chía de Juan Llorca no dejó a nadie indiferente, así que ¡ya podéis disfrutarla al completo en este artículo!

Introducción

El origen de estas semillas es una planta herbácea natural de Centroamérica, utilizadas en muchos casos tras ser molidas y secadas, aunque no necesariamente. Se utiliza como ingrediente en ensaladas, sopas, batidos,… prácticamente cualquier receta, en la que siempre se destaca su valor antioxidante, aunque importe más con qué se mezcla que la Chía en sí misma.

¿Qué aportan?

Su uso más habitual es como ingrediente; de manera aproximada y por cada 10 gramos –un par de cucharadas, ración de ingrediente habitual- aporta unos 3.6 gramos de fibra dietética y 3 – 3.5 gramos de grasa, principalmente omega-3 (90%). También gran cantidad de minerales, como fósforo (12% de las necesidades), Magnesio (10%), Calcio, Hierro y Zinc (5%). Sobre el contenido vitamínico, destaca la Niacina (B3) y la Tiamina (B1).

En estas cucharadas aparecerán compuestos con potente actividad antioxidante, como la quercetina, miricetina y el ácido cafeico, aunque no está aún demostrado que influyan positivamente en varios factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades.

Por otro lado, no se le conocen compuestos tóxicos o que puedan generar una reacción alérgica, por lo que podría ser un ingrediente consumido por cualquier población en cualquier situación de salud o enfermedad.

Así que sí: las semillas de chía son sorprendentes por sus características, que las hacen únicas y un buen ingrediente; pero tampoco son la panacea, como nada de manera aislada en la alimentación.

Receta

  • Cantidad: 4 personas
  • Tiempo de elaboración: 45 minutos
  • Dificultad: Difícil
  • Vegetariano y sin gluten

Ingredientes

  • ½ taza de semillas de chia
  • ½ taza de agua
  • ½ taza de manteca de coco
  • ½ taza de miel
  • 1/3 de taza de cacao en polvo
  • Pizca de sal
  • Unas gotas de extracto de vainilla

Elaboración

    1. Precalentamos el horno a 160ºC.
    2. Disolvemos la chia en el agua y la dejamos reposar hasta conseguir una textura gelatinosa.
    3. Utilizamos un molde engrasado o lo cubrimos con papel vegetal para que no se pegue durante la cocción.
    4. Mezcla todos los ingredientes en la túrmix.
    5. Vuelca la masa en la bandeja y hornéala durante 30-40 minutos. Se quedara una textura un poco pegajosa.

    Fuentes consultadas: