Hoy os contamos la historia del jardín del Instituto Central de Permacultura de las Montañas Rocosas en EE.UU, todo un ejemplo práctico de permacultura. Pero antes de adentrarnos en este caso de éxito, vamos a hablar un poco más sobre la permacultura.
Qué es la permacultura
Se trata de diseñar hábitats sostenibles y sistemas de agricultura que imitan a la naturaleza, un sistema que integra en armonía la casa con el paisaje, conservando los recursos naturales, ahorrando en materiales, a la vez que produciendo menos desechos para llegar a ser más sostenibles.
La Permacultura va más allá de la agricultura, ya que está basada en unos principios éticos sobre una forma de vivir, que busca trabajar con la Naturaleza y no contra ella, siendo su objetivo principal crear ecosistemas:
- Ecológicamente sanos.
- Económicamente viables.
- Que satisfagan nuestras necesidades.
- Que no utilicen nocivamente a las personas, la tierra o los recursos ni contaminen el medio ambiente.
- Que sean sostenibles a largo plazo.
El Huerto del CRMPI
Cualquier huerto o jardín que siga las bases de la permacultura debería seguir el ejemplo de Jerome Osentowski, quién diseñó hace 20 años el jardín del Instituto Central de Permacultura de las Montañas Rocosas (CRMPI) en EE.UU. En él podemos encontrar árboles frutales y otras hortalizas en un acre con alimentos comestibles y cuatro invernaderos, pero lo más impresionante de estos cultivos es que son productivos en un área situada al norte del valle Roaring Fork en Colorado. El clima es caluroso y seco en verano, pero frio en invierno, hasta tal punto que solo unas pocas especies de plantas y animales pueden sobrevivir.
Un suelo rico en nutrientes en el desierto
Hasta ese momento nadie había considerado cultivar en ese suelo rocoso, seco y con pocos nutrientes, pero gracias al actual conocimiento de los procesos de la naturaleza, Jerome pudo construir un suelo rico en nutrientes, fundando la base para un próspero ecosistema.
“Vine a Colorado en 1969, y pasé los primeros siete u ocho, diez años como monitor de esquí, y poco a poco me fui interesando por la comida saludable. Al pasar una mala etapa saludable a causa de la hiperglucemia, decidí investigar los alimentos del campo, y eso me llevó a cultivar mi propio huerto”.
Jerome empezó a cultivar en las llanuras del área de Basalt, con la certeza de que sería muy difícil cultivar cerca de su casa en la montaña Basalt, debido a los suelos áridos y a la dificultad de aprovechamiento del agua.
“Pero a partir de cuándo aprendí sobre permacultura, me di cuenta de que era completamente posible crear jardines preciosos usando materiales reciclados, y creando compost, abono usando plantas perennes y anuales combinándolas con diseño. Así que empezamos a cultivar anualmente durante 10 años o así, y poco a poco hicimos la transición a policultivos perennes en el exterior y ahora en interior, y hemos enseñado a cientos de personas aquí a través de programas de prácticas, cursos y talleres. Lo bonito sobre ellos es que ellos pueden venir y comer las frutas, ver la combinación de plantas en nuestros jardines y ver como construimos nuestro invernadero”.
Pero el éxito de Jerome en permacultura, no ha llegado de forma fácil sin obstáculos. En 2008, un fuego devastador quemó uno de sus primeros invernaderos tropicales. Pero aún así, Jerome no se rindió y siguió cultivando. La destrucción de este invernadero les dio la oportunidad de probar su última investigación.
Clima de batería
Este nuevo invernadero iba a ser mucho más avanzado, con una tecnología (a la que llaman “clima de batería”) que iba a hacer de un invernadero común, algo mucho más extraordinario.
Como dice Michael Thompson, el arquitecto del proyecto el “clima de batería” como ahora lo llamamos, son una serie de tuberías que toman el aire en el punto más alto del invernadero, lo bombean y expulsan en la parte sur del invernadero, y después ese aire no para de circular cogiendo calor y dejándolo bajo suelo almacenándolo”.
Además de diseñar invernaderos para empresas privadas y espacios de cultivo, CRMPI (Centra Rocky Mountain Permaculture Institute) están construyendo cúpulas de cultivo (similares a los invernaderos), para colegios locales de Colorado para aumentar la conciencia sobre la importancia de la economía alimentaria local. El instituto ha construido recientemente una cúpula de cultivo en el instituto Yampa Mountain en Glenwood Springs y en el instituto Roaring Fork en Carbondale. Ambas serán utilizadas como clases para planes de estudio sobre agricultura sostenible, y la comida producida se utilizará en los comedores de los colegios.
Como podemos ver, una vida sostenible puede crearse en cualquier lugar del mundo, incluso en un paraje en el que parecía imposible cultivar. La permacultura va ganando adeptos poco a poco y esperemos que en un futuro vaya en aumento y el estilo de vida de la sociedad sea mucho más saludable, para nosotros y para el planeta.
Más información sobre este proyecto
Si estáis interesados en el tema os dejamos unos enlaces que amplian la información que os hemos dado sobre el caso del Instituto Central de Permacultura de las Montañas Rocosas.
Otro enlace interesante sobre permacultura en EE.UU.: https://www.treehugger.com/lawn-garden/20-year-old-permaculture-forest-garden-in-the-mountains-videos.html